La ultima vez...

Adiós…Sí, adiós. El beso cálido de las tardes que había imaginado en vacaciones para esta temporada, quedó en un frío “Adiós”. Quisiera nunca haber llegado a esto. Quisiera nunca haberla amado tanto, haber entregado mi corazón y ahora terminar así. Hoy la vi, será la última vez que la vea como algo más, y me duele. Me duele dejar todo lo que vivimos en un frío Adiós, pero lo que más me duele es que yo lo estoy haciendo. Hoy la vi, tan bella como siempre cruzando la misma puerta por la que cruzó la semana pasada. Aquella vez la veía como el amor de mi vida, y ahora como una simple amiga… Hoy la vi, tenia aquella prenda que no me gustaba que usara, aquella mirada seria con la que, a esa misma hora, hace una semana me terminó. Hoy la vi...ya no podía hacer nada, solo temer que en algún futuro cercano, alguien no la pueda entender como yo, esté con ella y solo termine lastimándola. Hoy la vi...sacó de su mochila aquellos libros que le presté una vez, cuando me importaba. No digo que ahora no me importe, digo que no sirve de nada que me importe por ella ahora. Será una amiga a la distancia. Ayer intenté hacer la prueba, pensé que estaba listo para volver a verla, pero me equivoqué. Creyendo que había dejado todo pasar, creyendo que ya estaba mejor, que el corazón no me dolía por más que pensase en ella, me acerqué ese día. Terrible error. La miré después de casi una semana de no vernos, sentí como mi corazón se saliera, pero en medio de todo tenía la esperanza que ella me veía como amigo. Sin embargo, a pesar de eso ni me dirigió la palabra. Luego de soportar, sí, soportar, dos horas de tener que ver a la chica, que en ese momento aún amaba, sentada frente a mí, como nada más que una amiga, me fui de allí lo más pronto que pude, con algo en la mente. “No puedes aplicar el presente al pasado”.

Momento más tarde, la volví a ver. Ya sabía lo que debía hacer, le pedí aquellos libros. Y ahora estoy aquí después de unas horas de haberme alejado de ella, todo quedó con un frío adiós. El adiós sin ningún beso, abrazo o alguna muestra de cariño, pues ella sin saberlo, me acababa de ver, por última vez.

La soledad...

Soledad, oscuridad, la vida se ha apagado. Sentarse en frente de una pantalla esperando que alguien inicie la conversación, que eterna espera. Se que no empezará, ya nada es igual, por más que allí esté ella no me hablara. No me queda otra cosa más que buscar mi felicidad en otro lado. ¿Qué paso? ¿Qué sucedió? No lo sé, solo me queda empezar de nuevo. Empezar desde cero, que haré ahora, no puedo negar la realidad. Un abrazo se transforma en un apretón de manos; unas palabras de amor, en problemas del día a día y un beso, en un frío “hola”. ¿Dónde quedó lo que pasamos? ¿Dónde quedó lo que vivimos? Siento como si todo mi esfuerzo hubiera sido en vano. Quisiera nunca haberme enamorado, tal vez así ahora mismo no me estaría doliendo tanto. No me arrepiento de haberLA amado, me arrepiento de siempre caer en el mismo juego. Me arrepiento de siempre hacerme ilusiones rápidas, creyendo que el mundo en el que vivo es el mismo que imagino, creyendo que es un mundo en el que nadie te hace daño, un mundo en el que, si pones tu corazón en alguien, ese alguien no se apartará de ti, porque ese sentimiento tan fuerte que es el amor, los une en un lazo que hasta ahora no puedo entender. Al parecer ese lazo quedo más en mi mente en la realidad. Quisiera pensar que ella me dejo porque conoció a alguien mejor, quisiera pensar que me dejó porque sus padres la amenazaron, pero me doy con la dura realidad, FUE POR MIS ESTUPIDESES. Queriendo ser, el enamorado perfecto, tratando de hacerla sentir cómoda siempre, me olvide de mis propios intereses, y cuando los quise recuperar, el choque fue muy duro, y eso la hizo alejarse de mi. Maldigo el momento en el que comencé a amar, maldigo en el momento en el que me di cuenta de qué era el amor. Maldigo el momento en el que me di cuenta que vivo por ese sentimiento.
Duele estar sin ella, pero, no hay más nada que hacer, lo hecho, hecho está. Ahora solo me queda olvidarla, bueno tal vez no olvidarla, ella no tuvo la culpa de nada, sino… olvidar lo que sentí, olvidar ese amor que sentí por ella, no será fácil. Debo hacerlo. Esos pensamientos que me invaden diciendo “solo con ella podrás ser feliz”. IDIOTESES. Sí, en algún momento pensé que eso era verdad. Pero si analizo bien, pondría el caso supuesto que vuelva con ella. Esto se volvería a repetir, lo sé, soy un ser con mucha necesidad de cariño, así que lo que sucedió hace tiempo, volverá a suceder inevitablemente. Ella no lo comprendió, así que no es ella la que era para mí. ¿Ahora que voy a hacer? No me queda más que empezar de nuevo, y comenzar una vida sin ella. Ahora, ¿quién será la siguiente? La eterna pregunta…si bien no quiero contestarla aún, hay otra parte de mi que me dice que debo encontrar a la siguiente. Pero, hay algo que invade mi ser, algo que, he tratado de interpretar como miedo. Porque es lo primero que se me viene a la mente cuando siento aquel dolor. ¿Por qué miedo? Miedo de volver a sufrir, miedo de que me abandonen de nuevo. Quiero pero no quiero, el eterno dilema.
Desde aquel momento, me he encontrado con varias amigas, nadie tiene esa luz que tenia ella, se que nunca encontrare a nadie que sea como ella, con su alegría, sus bromas, su manera de hablarme, sí esa manera de hablarme…ahora que me pongo a pensar casi no me hablaba, ¿por qué sufro entonces? Soy maldito estúpido que solo quiere un poco de cariño y si no lo recibe se siente bien dándolo. En fin, siento que nadie me entenderá, no me hago problemas, ya estoy acostumbrado, al fin y al cabo no es tan importante. Solo quisiera poder encontrar a la persona ideal, una persona con la que pueda quedarme para siempre, alguien que no me haga sufrir, alguien que sea, de acá a unos años, el amor de mi vida.

Mi eterna utopia

Que frio...que seco...que...debo decirlo...dolor... no se que decir, no se que sentir, una eterna culpa me invade...que ize mal, no debi hacer eso, no debi amarla tanto, ¿Qué no debí hacer?.

Las respuestas no las encontraré, eso lo se, la misma historia de mi vida se repite una y otra vez, proyectando cosas, proyectando sueños, anhelos, TODO en una sola persona, al final no gano nada más que mi propia desesperación y cuando me doy cuenta, simplemente ya es muy tarde. Pero... la amé, no debería quejarme de ella así. Tengo razón la amé...y en este preciso momento la sigo amando, será difícil olvidarla, no porque hallamos vivido muchas cosas juntos, sino por el hecho de que...aunque ella no lo sepa, la puse como el centro de todo, el centro de mi vida, el centro de todo lo que he amado, de todo lo que e deseado, TODO, ella lo era todo, y ver como en frente de un monton de carros, sentados en una escalera a la luz de la tarde mientras un policía hacía sonar su pito...terminó conmigo...me causa más dolor del que alguna vez sentí.

¿Para que amar?.... he ahí la gran pregunta, pero cuando me doy cuenta ya lo estoy haciendo, cometiendo el mismo error una y otra vez, enamorándome, dando todo por esa persona y luego ver todo ese cariño desechado como cualquier cosa, ver como todo mi pasado se iba desvaneciendo ante mis ojos llevandose con él, una parte parte de mi corazón, una parte de mi vida...una parte de mi mente, una parte de mi mente en la que ella quedará pegada, impregnada cual recuerdo de verano.

La amo... no lo voy a negar, y si escribo esto no es para que lo lea y se arrepienta... lo escribo... por que...en este momento, mi unico consuelo...es una lápiz y una hoja, la misma hoja en la que alguna vez...le escribi una maldita...carta...de amor....