Capitulo V - Como un sueño, todo se desvaneció

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Nos miramos, estábamos felices, nos abrazamos y nos dirigimos al salón donde Guillermo ya se estaba preocupando por nosotros. Terminamos el trabajo y nos dirigimos al pabellón de medicina para dormir un momento, Guillermo en una esquina y Lucia y yo juntos en dos sillones. Quien diría que ese seria el comienzo de un nuevo episodio en mi vida, un episodio marcado por hechos que sin sentido alguno se dieron lugar en varios lugares que hasta ahora frecuento. Cada vez que paso por esos lugares, siento como se me encoge el corazón recordando lo que vivimos en cada uno, las historias que vivimos, las historias que pasamos, compartiendo la felicidad, compartiendo momentos que estoy seguro que ella tampoco olvida. Fueron días increíbles, casi como un sueño, había esperado tanto tiempo para poder darle mi amor a alguien y al fin encuentro a una persona que me quiere tal y como soy, debo admitir que soy una persona de un carácter bastante curioso, un carácter que ella aprendió a dominar. Y con ella, bueno, era una batalla constante, tenia una personalidad muy interesante también, muy difícil de entender debo añadir pero a fin de cuentas lo logre, o al menos eso creía.

Pasaron los mese y se acercaba la fecha de entrega final del trabajo anteriormente mencionado, debíamos acabarlo a como de lugar, pero el tiempo no se prestaba para eso. Vimos la posibilidad de amanecernos de nuevo en la universidad, sin embargo no estábamos dentro del rango de tiempo para reservar un laboratorio. Finalmente terminamos en mi casa, como la primera vez solo pudo venir Guillermo y Lucia. Estuvimos trabajando de la más normal, pero la noche s iba asomando, el cansancio se asomaba por un costado. En un momento dado Guillermo se canso y me pidió mi cuarto para poder dormir, yo asentí, así que se fue y nos quedamos Lucia y yo terminando el trabajo. El escenario estaba un poco cargado, una mujer, un hombre, cerca de las 3 de la mañana, y un frío increíble. La bese, pero lo que seria un beso corto se convirtió en algo que no había preparado.

El beso se prolongó más de lo que pensaba hasta que el aire caliente de la habitación y el calor helado de nuestros cuerpos sucumbió nuestros seres hasta el punto sin retorno. No lo voy a negar tenia miedo, miedo de convertirme solo en un objeto para ella, o peor aun, que sin querer ella se convierta en un objeto para mí. Sin embargo en ese momento nuestros sentimientos eran claros, ambos queríamos cometer ese acto de placer. Entre abrazos y besos y una atmosfera llena de pasión nos entregamos el uno al otro. Por alguna razón mi amor por ella se acrecentó mas de lo que esperaba, no lo voy a negar, en ese momento creía con todas mis fuerzas que estaríamos juntos para siempre. Tomamos desayuno, cortesía de mi madre, y seguimos trabajando, todo parecía ser como antes pero en realidad era muy diferente, la confianza había crecido, al igual que nuestro amor, estaba feliz, al fin había encontrado mi complemento.

Las cosas seguían normales sin embargo se iba terminando el ciclo y ambos sabíamos que luego de eso ella regresaría a su tierra natal y su futuro seria un tanto incierto. Llego un día que me pidió volverlo a hacer, tenia miedo, acaso ¿me estará empezando a ver como un objeto?, no lo se, pero al igual que la ultima vez, nos dejamos llevar por nuestros instintos, me volví a enamorar de ella. Al final llego el día, un beso, un largo abrazo, pero estábamos tranquilos, confiábamos en el destino, a pesar de las distancias nuestro amor perduraría. Me dirigí a mi hogar ya cuando ella abordó el bus que la llevaría fuera de ese lugar. No lo voy a negar, estaba triste, nunca nos habíamos separado de esa manera. Desde el momento en que se fue, el último beso, todas esas cosas permanecieron en mi mente como una flecha que me clavaba el corazón cada momento que recordaba que estaba lejos de mí.

Los días pasaron, las conversaciones se hacían cada vez mas efímeras, los mensajes fueron bajando de cantidad, y el amor se iba desvaneciendo, yo la amaba, sin embargo sentía que sus sentimientos hacia mi iban decayendo. Hasta que un día me dijo que creía que estaba embarazada, el mundo se me vino encima, acaso era esa la causa de su alejamiento con respecto a mi, y si así fuera, ¿A qué le tenia miedo? Ella sabía que a pesar de todo, yo estaría a su lado. Sin embargo con ese asunto encima, no tuvo reparo en pedirme que termináramos. Como la primera vez, no tenia donde ver, no sabia que sentir, no sabia que debía hacer, ella era con quien me quería casar, que debía de hacer, mi mente maduró demasiado rápido, y el amor que tenia por ella cambio y se volvió en algo mas profundo, quería casarme con ella, lo deseaba, quería pasar los siguientes años de mi vida a su lado. Nunca tuve tiempo de decírselo, ¿Dónde estará ahora? No lo sé, solo se que no esta pensando en mi.

Debo admitir aquí ante todos que soy un ser terriblemente sensible, y esa fue la causa de porqué hice lo que hice. Paso algo más de un mes, ya no quería hablar con ella, ni siquiera pensar en ella, el simple echo que apareciese en mi mente, significaría recordar todo lo que sucedió, y para mi eso era como poner el dedo en la llaga. Cuando ya estuve tranquilo, quise invitarla a salir, es como si, no quisiera creer en lo que me dijo, como si quisiera que me lo dijera en la cara. Después de varios intentos fallidos al fin logré convencerla, saldríamos un día miércoles, como olvidarlo. Estaba ansioso, en las noches casi no dormía, y en el día muy pocas veces prestaba atención a las clases, pero creo que ese tiempo de ansiedad me hizo recapacitar y es algo que siempre le agradeceré.

Llegó el día al fin, esperándola como siempre en el mismo lugar, hasta que apareció, tan bella con la primera vez, ella me saludo y caminamos, ella con sus manos juntas y yo con las manos en los bolsillos. ¿Quién diría que unas semanas atrás éramos una pareja? Tenía unas ganas inmensas de abrazarla con todas mis fuerzas, no la veía después de casi 2 meses, tenía ese dolor en la garganta que me atormentaba en cada momento de tristeza. Sin embargo eso era lo que quería, estar a su lado, la última vez. Después de pasear y jugar por una hora más o menos nos dirigimos a un Starbucks, fue idea mía, quería que el escenario donde empezó todo, sea el mismo en el que termine. El olor a café, el sonido de los pedidos, el Jazz como música de fondo, era un escenario bastante agradable y sobre todo, se prestaba para lo que haría. Empezamos a hablar.

J : Quien lo diría, ¿recuerdas este lugar?

L : ehhh… si pero por favor no hables de eso.

J : Lamento engañarte pero en realidad esa fue la verdadera razón por la que te pedí que vinieras conmigo.

L : Esta bien, dime.

J : Ase unos días en este preciso momento iba a estar aquí, arrodillado pidiéndote que volvieras conmigo, y de verdad era lo que quería, dejaste una huella en mi vida que será muy difícil de borrar, no lo voy a negar. Además como tú muy bien sabes fuiste mi primer amor, y borrar eso es mucho más difícil. No quiero decir que no te ame, al contrario, después de todo lo que paso entre nosotros, me fui enamorando cada vez mas de ti, y ese amor se volvió incontrolable. Pero el hecho que terminaras conmigo y el tiempo que paso entre eso y ahora me a hecho pensar mejor las cosas, me a hecho valorarme a mi mismo, y puedo decir que a pesar que me este muriendo por dentro porque ya nada será igual, ya no te tendré a mi lado nunca mas, a pesar de todo eso, te sigo amando. Y bueno no quiero que suene muy fuerte pero, No te quiero volver a ver, así que es posible que esta sea la ultima ves que nos veamos e incluso que hablemos, no es que te odie al mismo tiempo, es porque justamente tener ese sentimiento y no tenerte cerca me lastima, así que lo mejor será olvidarte, será un tramo largo, pero se que lo puedo lograr solo.

En ese momento me puse de pie y le dije que pondré de todo de mi parte para ya no pensar en ella i le pedí que me hiciese ese favor también, me puse en cuclillas frente a ella y le dije: - Perdóname por lo que estoy a punto de hacer - , En ese momento le di el ultimo beso, era la primera vez que le robaba un beso de esa manera, un beso lleno de amor, un beso lleno de pasión, un beso lleno de dolor, fue rápido, no tuvo tiempo de reaccionar, me pare y le dije que esperaba que algún día pueda encontrar el amor de verdad con alguien a quien ella quiera, la mire, conteniendo aun las lagrimas, y pensando en que ese seria el ultimo beso, la ultima vez que la veía, la ultima vez que la tenia frente a mi; me acerqué a su oído y le dije con una voz tenue: "Adiós, Lucia…."

Y de esa manera me despedí, no mire para atrás, no se si estuvo viniendo detrás mío, solo miraba hacia delante como la primera que terminamos, abordé mi bus, para dirigirme al instituto, no volví la mirada, no quería volver a verla, no quería volver a sufrir de esa manera, solo quería encontrar la felicidad, solo quería un “Te Quiero”.

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